27 nov 2017

La leyenda del apellido Solís en Cáceres. Detalle histórico e ideas de aventura para Aquelarre

Ésta vez nos centramos en una leyenda que da origen al nombre de una de las familias nobiliarias más conocidas en la ciudad de Cáceres: los Solís. Cabe decir que este apellido está presente en la ciudad desde que el rey leonés Alfonso IX la reconquistara en el año 1229. El origen anterior de su presencia asciende a tierras astur-leonesas. En Cáceres, el linaje de los Solís se expandió por diversos ámbitos de la vida religiosa, los concejos, las encomiendas y demás señoríos de propiedad privada, entre otros. En la actualidad, hablar de los Solís es sinónimo de recordar su escudo solariego sobre la entrada de su palacio, en pleno casco antiguo de la ciudad. Pese a que existen varias leyendas en torno a este apellido y sus portadores, recogemos aquí la del origen de su nombre. Os dejo la versión pdf más arriba, en el apartado Diarios de Antaño, en Herramientas roleras, . Que lo disfrutéis.

ANTECEDENTES

Año 1491. Campaña del Reino Nazarí de Granada.

Los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, decidieron dar un golpe definitivo sobre la mesa en la captura de la ciudad de Granada, gobernada por su último rey musulmán, el sultán Boabdil. Tras un largo hostigamiento, lograron hacer rendir la ciudad y tomarla, finalizando la campaña militar contra el último reducto musulmán en la Península.

La rendición de Granada, de Francisco Padilla.
Detalle parcial de los Reyes Católicos al final de
la campaña granadina
Claro que, hasta este preciso año, el hostigamiento para la futura toma de la ciudad estaba siendo dirigido desde un campamento militar situado en un emplazamiento conocido como el Gozco (o Goxo), cerca de la alquería de Huécar, a modo de base y cuartel. Estaba situado a cierta distancia de la ciudad, y los Reyes mandaron construir entre tiendas de campañas, lonas y lienzos un torreón de uso personal, fabricado en madera, donde poder aposentarse en medio de aquel entorno bélico y vigilar con perspectiva los acontecimientos de la guerra.

Ocurrió que una de las noches una de las sirvientas de la reina Isabel colocó por descuido una vela junto a las cortinas interiores del torreón. Éste, construido en madera, no tardo en ser envuelto y devorado por llamas, y provocando así un incendio que se extendió y arrasó todo el campamento. A partir de este suceso se determinó la construcción de un campamento permanente que llevaría el nombre de Santa Fe (aunque no fue el desencadenante de tal decisión, sino que estaba planificado con anterioridad). La nueva ciudad de apoyo bélico sustituiría la lona las tiendas por la piedra de los muros, y minaría aún más la moral de Boabdil antes de la futura rendición.


ANACRONISMOS DE LA LEYENDA

La leyenda del apellido Solís en la ciudad de Cáceres parte de estos acontecimientos, y cuenta que la mismísima reina Isabel emprendió un viaje con un séquito desde el campamento militar hacia el norte, a través de la Vía de la Plata, con la intención de llegar a Tordesillas, en Valladolid, lugar donde se establecían en ese momento las Cortes Generales de Castilla... o tal vez no. Cabe aclarar que en la época en que nos encontramos (el año 1491) las últimas Cortes de Castilla fueron celebradas en Toledo dos años antes; ni tan siquiera las últimas Cortes de Aragón (celebradas en Tarazona siete años antes) coinciden en el tiempo con la veracidad histórica de los hechos narrados. Evidentemente, el anacronismo de la leyenda del apellido Solís en la ciudad de Cáceres se perdona dada la necesidad para la construcción del relato fundacional entremezclando fechas y eventos.

Panorámica del casco histórico de Cáceres
Pues bien, aclarado este punto, la intención de la reina Isabel era acudir a las Cortes castellanas (cuya representación regente la sustituía en pos de su estancia en la campaña musulmana) con motivo de recaudar fondos para la construcción de la ciudad militar proyectada frente a Granada. El asedio a Boabdil no era enteramente encarnizado, pero aún así era costoso, y sufragar la guerra con los fondos de la Corona y los tributos generales no era suficiente. Una inyección económica de urgencia haría que aquellos muros, cuarteles y murallas de la futura Santa Fe estuvieran terminados en poco tiempo, y la conquista de Granada fuera una realidad a corto plazo. El empuje económico habría que pactarlo y resolverlo de inmediato antes de que se disolvieran las Cortes.

EL ENCARGO DE SU MAJESTAD

Escudo de la casa del Sol, Cáceres
De esta forma, cuando Isabel recaló en Cáceres comprendió que no llegaría a tiempo a la celebración de las mismas. Es por ello que mandó buscar en la ciudad a alguien con buena voluntad, entereza y bien mandado, el cual fuera capaz de partir desde allí hacia Tordesillas cuanto antes para solicitar el pago económico. Una vez encontrado a un joven con buena disposición, la reina le habló diciéndole: “Si con el sol is, y con el sol volvéis, noble seréis”, procurando así hacerle entender la necesidad de presteza del recado...

La leyenda del origen cacereño del apellido Solís no se extiende mucho más. Relata que aquel muchacho partió al galope a lomos de un caballo y logró acudir a la celebración de las Cortes, antes de su disolución, llevando el mensaje de Isabel y cumpliendo su cometido. A veces se cita que tomó varios caballos durante su viaje, extenuándolos por completo. Además, se dice que logró regresar a la ciudad antes de la caída del sol, y la reina cumplió su parte, nombrándole maestre de la Orden de Alcántara, entregándole el apellido Solís y otorgándole escudo nobiliario: un sol con rostro humano, cuyos rayos son mordidos por ocho cabezas de serpiente o dragón; y sobre él se alza un yelmo de caballero coronándolo y conmemorando el título nobiliario concedido por la reina Isabel.

IDEAS DE AVENTURA PARA AQUELARRE:
  • El joven al que le dan el encargo en realidad un bandido de mala vida, el cual tiene un hermano que anda en otras lides (es un copista del Concejo de la ciudad). Con la ayuda de los PJ, el bandido intentará embaucar al hermano para que le diseñe y falsifique un documento simulando ser un comprobante de las Cortes Generales, dirigido a la Reina. Por supuesto engañar a Su Majestad es un precio que se paga demasiado caro.
  • El joven contrata a los PJ para que lo acompañen a visitar a un viejo ermitaño que vive en las serranías en torno a la ciudad. Su intención no es sino para pedirle ayuda, pues las malas lenguas dicen que es mago o algo peor, y que es capaz de recorrer grandes distancias a su antojo. Por un pequeño encargo que deberán cumplir en un corto espacio de tiempo (acabar con algún enemigo suyo, por ejemplo) les recompensará creando un portal mágico u ofreciéndoles un caballo volador para cumplir tamaña empresa.
  • El joven contratado por la Reina es en realidad uno de los PJ, el cual va acompañado del resto de jugadores en la marcha. Tras hacerse con unos caballos y cabalgar veloces se adentran de una extraña niebla a medida que se adentran en tierras salmantinas. Cuando se dan cuenta, el PJ señalado por la reina se da cuenta de que tiene en su poder un poder firmado por las Cortes Generales, apoyando la propuesta de Isabel. Alguien en el Infierno les ha evitado una larga marcha que tal vez no cumplieran a tiempo, y de tal manera podrán regresar con lo cumplido. Claro que los seres del inframundo no olvidan, y no ayudan a los mortales de manera gratuita...

No hay comentarios:

Publicar un comentario